Érase una vez: de Ezeiza a Frankfurt
Este mate en Europa comienza en el aeropuerto de Ezeiza, Buenos Aires
¿Cómo me podía despedir Argentina? Por un lado, junto a mi familia y conocidos haciendo el "aguante"; por el otro, con demora de partida porque la torre de control del aeropuerto de Ezeiza no daba la autorización de partir por "problemas" con los radares. Nada nuevo hasta ahí.
El despegue, sin palabras, pura adrenalina. Lo mas parecido es la montaña rusa, y ¡como vibra el suelo! me saque las zapatillas para sentir bien la vibración del despegue.
El avión, algo asombroso, como toda maquina creada por la ingeniería.
Incómodo, como todo lo denominado clase "económica". Apenas había lugar entre los asientos como para mover los pies, y no las piernas.
A mi lado derecho mis compañeros, a mi lado izquierdo un señor de apariencia europea, le dije "hola" y me respondió "hallo", que mejor momento para refrescar el idioma alemán.
Hablamos un buen rato sobre muchas cosas, es ingeniero de software y trabaja en Alemania. Me dió su tarjeta profesional para que le escriba o le envíe mi CV.
El viaje dentro y fuera del avión
Las azafatas pasan por los pasillos con carritos llenos de bebida y comida. Pedís lo que quieras (hablan alemán, español e inglés).
Cada 20 minutos se muestra en los televisores la información actual del vuelo:
* altura (11000 mtr)
* velocidad (1050 km/hr)
* temperatura externa (-50°C... si menos cincuenta grados centigrados a esa altura).
Dormía una hora y me despertaba de lo incomodo que estaba (y eso que tenia antifaz y almohada inflable que me facilito mi abuela Nelly).
Las pantallas mostraban la ubicación del avión sobre el mapa del mundo... entonces pasamos por sobre de: Río Uruguay, Brasil, Océano Atlántico, parte de África, Portugal, España, Suiza y finalmente Alemania.
Aterrizando en suelo alemán: Frankfurt
Si cerras los ojos, es como que estas dentro de un colectivo y de repente empieza a frenar por unos 10 segundos, simple y rápido. Nos pareció tan perfecto el aterrizaje que después aplaudimos a los pilotos.
El aeropuerto de Frankfurt es enorme, tengo que poner fotos acá porque no tengo palabras para describirlo. Mi primer contacto con aire y suelo alemán.
A la noche fuimos a un festival de las colectividades al margen del río Neckar, fuegos artificiales de otro planeta, música de cada cultura (brasil presente), cerveza, salchichas asadas - Wurst, Döner - Sandwich turco con esa carne que la cocinan con pantallas eléctricas mientras gira, denominada Kebab, y mucha gente de todo el mundo.
¿Cómo me podía despedir Argentina? Por un lado, junto a mi familia y conocidos haciendo el "aguante"; por el otro, con demora de partida porque la torre de control del aeropuerto de Ezeiza no daba la autorización de partir por "problemas" con los radares. Nada nuevo hasta ahí.
El despegue, sin palabras, pura adrenalina. Lo mas parecido es la montaña rusa, y ¡como vibra el suelo! me saque las zapatillas para sentir bien la vibración del despegue.
Incómodo, como todo lo denominado clase "económica". Apenas había lugar entre los asientos como para mover los pies, y no las piernas.
A mi lado derecho mis compañeros, a mi lado izquierdo un señor de apariencia europea, le dije "hola" y me respondió "hallo", que mejor momento para refrescar el idioma alemán.
Hablamos un buen rato sobre muchas cosas, es ingeniero de software y trabaja en Alemania. Me dió su tarjeta profesional para que le escriba o le envíe mi CV.
El viaje dentro y fuera del avión
Las azafatas pasan por los pasillos con carritos llenos de bebida y comida. Pedís lo que quieras (hablan alemán, español e inglés).
Cada 20 minutos se muestra en los televisores la información actual del vuelo:
* altura (11000 mtr)
* velocidad (1050 km/hr)
* temperatura externa (-50°C... si menos cincuenta grados centigrados a esa altura).
Dormía una hora y me despertaba de lo incomodo que estaba (y eso que tenia antifaz y almohada inflable que me facilito mi abuela Nelly).
Las pantallas mostraban la ubicación del avión sobre el mapa del mundo... entonces pasamos por sobre de: Río Uruguay, Brasil, Océano Atlántico, parte de África, Portugal, España, Suiza y finalmente Alemania.
Aterrizando en suelo alemán: Frankfurt
Si cerras los ojos, es como que estas dentro de un colectivo y de repente empieza a frenar por unos 10 segundos, simple y rápido. Nos pareció tan perfecto el aterrizaje que después aplaudimos a los pilotos.
El aeropuerto de Frankfurt es enorme, tengo que poner fotos acá porque no tengo palabras para describirlo. Mi primer contacto con aire y suelo alemán.
Comentarios
Eine enorme Umarmung
Bueno, metele con eso de los contactos eh! Acelerame el tramite que tenemos que poner la consultora ;)
Seguí escribiendo y fijate de poner fotos asi te envidiamos mas! :P
Abrazo argentino!
Ing. Silva
ESPERO ANDES BRILLANTE. SI NO ES ASÍ PONETE LAS PILAS QUE LAS GRANDES EMPRESAS NO ESTÁN HECHAS PARA LOS CAGONES. POR ACÁ BRILLANTE TODO. MARAVILLOSO. ASÍ QUE SOLO PREOCUPATE POR DISFRUTAR TODO (INCLUSO EL SACRIFICIO) SABIENDO QUE ES UNA EXCELENTE Y QUIZÁS ÚNICA OPORTUNIDAD QUE NO DEBE DESPERDICIARSE.
HOY, JARDINERÍA, LAVADO DE ROPA, TRABAJO EN UNA EXPOSICIÓN Y POR LA NOCHE ME INVITARON A FESTEJAR LA PRIMAVERA. ÉXITOS MIL.
Activo como siempre vos! nos hablamos ahora q dominas el skype.